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jueves, 20 de mayo de 2010

Déficits de Atención e Hiperactividad en Niños por Plaguicidas

20/05/2010..-En una muestra representativa de niños de EEUU, aquellos con niveles más altos de metabolitos de organofosfatos (plaguicidas) en la orina fueron más propensos a tener transtorno de atención con hiperactividad (TDAH) que los niños con niveles más bajos por una menor exposición a estos compuestos, informaron los investigadores en la edición de junio de Pediatría, publicado en Internet hoy.

“Cada aumento de 10 veces en la concentración urinaria de los metabolitos de organofosfatos se asoció con un 55% a 72% de aumento en las probabilidades de TDAH”, dijo la principal autora del estudio, Maryse F. Bouchard PhD, del Departamento de Medio Ambiente y Salud Ocupacional de la Universidad de Montreal, Quebec, Canadá, a Medscape Psiquiatría.

Investigaciones anteriores similares, señaló la Dra. Bouchard, se han centrado en “grupos especiales con altos niveles de exposición, como niños de comunidades agrícolas, que reportaron deficiencias cognitivas relacionadas con los plaguicidas (memoria y atención), y problemas de comportamiento. El presente estudio es la primera investigación sobre el desarrollo neurológico de los niños a llevarse a cabo en un grupo sin una particular exposición a plaguicidas.

“Estudio Pionero”

El Dr. Michael L. Goldstein, quien no participó en el estudio, dijo que los resultados del estudio son “muy interesantes hallazgos de un estudio muy bien hecho y con una buena base de datos.” El informe, dijo, “ciertamente me llamó la atención cuando lo leí, me quedé impresionado. Creo que es un estudio pionero, agregó el Dr. Goldstein, especialista en neurología infantil con Western Neurológicos Asociados de Salt Lake City, Utah, y miembro del cuerpo docente de la Academia Americana de Neurología.

Los resultados se basan en datos de corte transversal en 1139 niños, con edades entre 8 a 15 años de La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (2000-2004). Ciento diecinueve de los niños cumplieron con los códigos de diagnóstico actuales de TDAH. Cuando los niños que toman medicamentos para el TDAH fueron incluídos como sujetos del estudio, llegaron a 148 casos.

Seis de los metabolitos de fosfato urinario dialquil (DAP), derivados de la degradación de los diferentes organofosfatos se midieron en la orina para proporcionar un indicador de la carga corporal de estos comunes organofosfatos. Las proporciones de niños con concentraciones de DAP urinaria por debajo del límite de detección tenían entre 35.7% y 80.0%. La mayoría de los niños (93.8%) tenían uno o más metabolitos detectables de los 6 DAP medidos. Sexo, raza / origen étnico, y la duración de ayuno no se asociaron significativamente con las concentraciones de metabolitos DAP (todos P> 0.3).

Del metabolito de plaguicidas detectado con mayor frecuencia, tiofosfato dimetil (64.3%), aquellos con niveles superiores al promedio de las concentraciones detectables tuvieron casi el doble de probabilidades de TDAH (radio de ajuste [OR], 1.93; intérvalo de confianza del 95% [IC]: 1.23 a 3.02) en comparación con los niños con niveles no detectables. El radio de ajuste (OR) fue mayor cuando los niños que toman medicamentos para TDAH fueron incluídos como sujetos del estudio (OR ajustado: 2.12, IC 95%, 1.32 a 3.43).

Asociación tiene sentido biológico

Varios mecanismos biológicos pueden explicar la asociación entre los plaguicidas de organofosfatos y el TDAH.

“Se sabe muy bien que los organofosfatos alteran la actividad cerebral neuroquímica. De hecho, su eficacia como plaguicidas se debe a sus efectos tóxicos sobre el sistema nervioso central de los insectos”, señaló la Dra. Bouchard.

“En particular, los organofosfatos perturban la actividad de la acetilcolina, un neurotransmisor que también está implicado en el TDAH. Además los organofosfatos afectan ciertos factores de crecimiento, varios sistemas de neurotransmisores, y sistemas de mensajeros secundarios. Estos cambios en la actividad cerebral pueden resultar en síntomas de TDAH”, -agregó.

El Dr. Goldstein dijo que los datos sobre los plaguicidas de organofosfatos y TDAH “parecen los que vimos hace 30 y 40 años relacionados a la exposición al plomo, y puede que sea igual – que incluso pequeñas exposiciones (a plaguicidas de organofosfatos) sean muy perjudiciales a los niños.

Necesidad de repetición de los resultados

El actual estudio, señala el equipo de la Dra. Bouchard, tiene varias limitaciones – la más importante es el uso de sólo una muestra simple de orina para evaluar la exposición a estos plaguicidas.

“Dada la naturaleza transversal de nuestro análisis, no podemos descartar la posibilidad de que los niños con TDAH estén involucrados en comportamientos que los expongan a mayores niveles de organofosfatos” anotaron.

Sin embargo, dado a que los DAPs son eliminados del cuerpo en 3 a 6 días, su detección en la orina de la mayoría de los niños estudiados indica una exposición continua.

Aproximadamente 40 plaguicidas de organofosfatos están registrados en la Agencia de Protección Ambiental de EEUU (EPA siglas en Inglés), indican los investigadores en su informe. En el 2001, 33 millones de Kilogramos de organofosfatos fueron utilizados tanto en terrenos agrícolas como residenciales. La dieta es una fuente importante de exposición a los pesticidas para los niños. Según un informe de EEUU en el 2008, concentraciones detectables de malatión organofosfato fueron encontrados en 28% de las muestras de arándanos congelados, 25% en muestras de fresas, y 19% en muestras de apio.

“Este es el primer estudio que relaciona la exposición a los pesticidas en niveles que son comunes en la población general con efectos adversos para la salud”, dijo la Dra. Bouchard. “Los resultados deben ser replicados antes de realizar radicales conclusiones. Sin embargo, debe ser prudente reducir la exposición a estos plaguicidas reduciendo su uso en la agricultura.”

Respuesta de la industria

En una declaración escrita a Medscape Psiquiatría, CropLife America, un grupo industrial que representa científicos en plantas que desarrollan, fabrican, formulan y distribuyen soluciones para la agricultura y manejo de plagas en Estados Unidos, expresó después de haber revisado el estudio “pensamos que se necesita más investigación para determinar si existe una relación directa entre la exposición a plaguicidas de organofosfatos y el desarrollo del TDAH en niños.

“Todos los productos de protección a los cultivos son ampliamente revisados por las agencias reguladoras antes de su aprobación de uso en el mercado. Muchos factores científicos son examinados por los reguladores gubernamentales de plaguicidas, basados en pruebas de laboratorio, los cuales tienen como objetivo garantizar la seguridad para el medio ambiente y para las personas, incluyendo niños,” dice la declaración. “La clase de compuestos de protección de cultivos utilizados en este estudio han sido aprobados y registrados por la EPA y, cuando se utilizan de acuerdo al etiquetado, la EPA ha determinado que son seguros.”

El estudio fue apoyado por una subvención del Instituto Nacional de Ciencias de Salud Ambiental. Los autores del estudio y el Dr. Goldstein han revelado ninguna relación financiera relevante.




Fuente original aqui

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