El estudio, liderado por el doctor Bingjian Zhang, concluye que este alimento se usaba para rellenar los huecos existentes entre los bloques de piedra hace 1.500 millones de años. Para ello, los arquitectos de la época trituraban el arroz hasta que se convertía en una especie de masa pegajosa más eficaz que la cal por su resistencia a las altas temperaturas y al agua. El secreto de esta eficacia reside en la amilopectina, un tipo de carbohidrato que se encuentra en el arroz y en otros alimentos.
Según Zhang, el uso del arroz en las construcciones "fue uno de los grandes hitos tecnológicos de su tiempo" ya que se empleaba en pagodas, tumbas y edificios. Muchas de estas estructuras lograron sobrevivir incluso a los terremotos.
Muy interesante
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