Pages

Búsqueda personalizada

lunes, 28 de diciembre de 2009

El misterio de los manatíes amazónicos



   Apenas bajan las aguas, los manatíes comienzan su travesía para evitar los ataques de los depredadores.
Jody Bourton
BBC

Un equipo de expertos brasileños y británicos resolvieron el misterio que rodeaba la migración de los manatíes.
En los últimos años, los científicos descubrieron que este mamífero acuático emigra de las aguas superficiales a aguas más profundas.

Sin embargo, no fue sino hasta hace muy poco que los investigadores hallaron que los manatíes hacen este peligroso viaje para evitar ataques de depredadores en la temporada en que bajan las aguas.
Esto significa, según los expertos, que la especie puede estar corriendo más riesgos de lo que se pensaba.
Los resultados de la investigación fueron presentados en la Revista de Zoología.

El gran escape

El elusivo manatí amazónico (Trichechus inunguis) es un mamífero grande que se alimenta de plantas y vive en aguas dulces.
Debido a su particular forma, se lo describe como una mezcla entre una foca y un hipopótamo.
Esta especie puede encontrarse únicamente en la cuenca del Amazonas, desde la boca del río hasta el origen de los tributarios de Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana y Perú.
Los investigadores estudiaron los manatíes que habitan las reservas de Mamiraua y Amana en el noroeste de Brasil.
Los expertos les preguntaron a los habitantes locales sobre el movimiento de los animales, estudiaron la forma y la profundidad de los ríos y lagos locales y siguieron (ayudados por etiquetas electromagnéticas) el recorrido de 10 manatíes.
Durante la temporada de crecida de las aguas, entre mediados de mayo y fines de junio, los investigadores notaron que los manatíes vivían en lagos que se forman por las inundaciones de los ríos en la llanura.
Allí, estos animales consumen plantas acuáticas por el equivalente al 8% de su peso corporal.

Cuando las aguas bajan, entre octubre y noviembre, los animales comienzan a migrar a través de las rías. Los científicos creen que esta migración se debe a que resulta muy peligroso para ellos permanecer en aguas poco profundas.
Si los manatíes no se moviesen, quedarían atrapados y expuestos a cazadores como los caimanes, jaguares e incluso seres humanos.

                                             Los investigadores les colocaron collares electrónicos para seguir sus movimientos.
De todos los males, el menor

Trasladarse a aguas más profundas no es fácil, ya que los mamíferos deben atravesar ríos muy estrechos en cuyas márgenes suelen apostarse los cazadores para esperarlos.
Otra desventaja de la travesía es que los manatíes no pueden alimentarse durante varios meses por la falta de plantas acuáticas.

"Los manatíes amazónicos emigran desde una zona que se torna inhabitable hacia una región donde las condiciones de vida no son fáciles", dice el doctor Eduardo Moraes Arraut, del Instituto Nacional de Investigación Espacial de San Paulo, Brasil.
De este modo, eligen el menor de los males.
"Cuando tienes dos opciones que no son buenas, eliges la menos mala", explica Arraut.

Respeto a los cazadores

"Me sorprendí con lo difícil que es para el manatí sobrevivir durante la temporada en que bajan las aguas", agrega el experto.
"También me asombró el hecho de que probablemente los maten en toda la región del Amazonas durante el período migratorio".
Si bien su caza es ilegal, los locales los valoran por su carne y porque matarlos, les da estatus.
"Es muy difícil matar uno y los cazadores son muy respetados dentro de la comunidad", explica Arraut.
Los investigadores tienen previsto seguir el movimiento de los manatíes en otras regiones del Amazonas para ver si se trata de un fenómeno generalizado.

0 comentarios

Publicar un comentario

Busca desde de aquí lo que necesites

Búsqueda personalizada